La relación entre alimentación y salud es algo percibido desde hace más de 20 siglos. A partir de 1960 se establece una correlación entre el desarrollo de ciertas enfermedades y ciertos aspectos de la composición de la dieta. De hecho, organismos internacionales como la OMS disponen de guías dietéticas que orientan sobre los patrones de consumo alimentario más saludables para la población de cada país.
Hoy vamos a tratar de dar una serie de pautas alimenticias para aquellas personas que padecen fibrilación auricular; y es que, en esta patología, una dieta saludable es casi tan importante como el tratamiento farmacológico.
La primera recomendación es de carácter general: evita el sobrepeso y sigue una dieta sana y equilibrada, teniendo presente siempre la idea de que “no necesitas comer menos, solo necesitas comer bien”. En el caso concreto de las personas que padecen fibrilación auricular, hay datos científicos que respaldan con fuerza la recomendación de pérdida de peso tanto para la prevención como para el tratamiento de esta afección cardiaca. Etas indicaciones de carácter general se concretan en reducir las grasas saturadas, el colesterol y el sodio.
A continuación, vamos a referenciar algunos alimentos que te ayudarán a mantener a raya la fibrilación auricular y te permitirán disfrutar de un corazón sano. Son los siguientes:
- Nueces. Las nueces son uno de los mejores alimentos para nuestro corazón. Ayudan a reducir el riesgo de fibrilación auricular, ya que protegen el corazón con sus altos niveles de ácidos Omega-3.
- Frutas y verduras. Frutas y verduras nos proporcionan vitaminas, minerales, fibras, agua, enzimas, etc. que ayudan a reducir el riesgo de accidentes cardiovasculares.
Curry. Este condimento ayuda a reducir la inflamación del corazón y las probabilidades de sufrir insuficiencia cardíaca e hipertensión. - Té verde. El té verde estimula nuestro cerebro y nos ayuda a combatir el sobrepeso. Esta bebida, repleta de antioxidantes, reduce el riesgo de enfermedades cardíacas, ya que contribuye a disminuir los niveles altos de grasa en la sangre.
- Aceite de oliva. La ingesta diaria de aceite de oliva ayuda a proteger la salud cardiovascular gracias a su composición en ácidos grasos y por sus antioxidantes.
- Pescado. Comer habitualmente pescado es la clave para mantener un corazón sano, ya que ayuda a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos e incrementa la fluidez de la sangre.
De la misma manera que existen alimentos que nos reportan beneficios de manera evidente, es igualmente cierto que hay otros productos que no resultan tan indicados. Así, si padeces fibrilación auricular deberías evitar:
- El consumo de alcohol está asociado con un mayor riesgo de fibrilación auricular en función de las dosis. Aunque el consumo moderado de alcohol no suele causar problemas en los pacientes con fibrilación auricular, se recomienda encarecidamente evitar su consumo excesivo.
- Una dieta baja en sales es buena para controlar la hipertensión que acompaña a muchos pacientes con fibrilación auricular.
- Fumar es malo para todos. En el caso de la fibrilación auricular, se produce un daño adicional porque fumar aumenta la frecuencia cardiaca y reduce el nivel de oxígeno en la sangre.
Si tienes fibrilación auricular o si convives con alguien que la padezca, no dudes en introducir estos cambios alimenticios en tu dieta. Las mejoras serán evidentes. Si nadie de tu entorno sufre esta afección cardiaca, también deberías adoptar estas recomendaciones básicas puesto que un estilo de vida saludable y una dieta equilibrada es importante para garantizar el bienestar de cualquier persona. Y es que más vale prevenir, que curar.